…Pero…existe una habilidad innata que no ha sido propuesta; cada noche o momento libre hemos visto a Sara a lo largo de los años, coger un folio, doblarlo cuidadosamente por la mitad y en la soledad de su cuarto, tranquila, relajada, tomar su bolígrafo y disponerse a plasmar sus emociones, a base de impulsos, elaborar un patrón e ir dibujando rayas, círculos o formas redondeadas de modo que el resultado resultaba muy bello.
…Un día vimos en el conjunto de todos ellos que era realmente la expresión de sus emociones y comenzamos a verlos de forma diferente. Era una manifestación artística propia.
Demuestra que nuestros hijos e hijas con Síndrome de Down tienen capacidades que están ahí, pero que no dejamos que afloren, ya que nosotros sí que tenemos el prejuicio de pensar en muchas ocasiones que no son capaces de desarrollar la creatividad que poseen, de la que nosotros somos incapaces.
La creatividad es una habilidad muy importante en el ser humano y la expresión de una emoción, es característico de ella,
ya sea bailando, pintando, sonriendo…