El dibujo de Alex es muy particular, destaca su lenguaje visual único, su gusto por el abarrotamiento de formas hieráticas y el contraste entre el blanco y el negro y las masas de color hacen de su estilo una expresión propia que no deja a nadie indiferente. La extrapolación de imágenes a su estilo personal y su simbolismo es un viaje fascinante. De esta forma puede contarnos una película con una imagen, puede narrar una historia de amor en un cuadro y puede introducirse a sí mismo en las escenas de las que él se siente participe, incluso escenas de ficción o de videojuegos.